Los viajes en avión conllevan varias incomodidades, sobre todo si viajamos en clase turista, donde los espacios reducidos no son los mejores aliados del confort. A este factor se suman otros errores comunes que cometemos como pasajeros sin darnos cuenta del riesgo que suponen para nuestra salud. De acuerdo con un articulo del portal Rider´s Digest, estas son las cosas que nunca deberías hacer durante un vuelo, especialmente en los de larga distancia.
Fuente: Foto: Ronald Sarayudej / CC BY 2.0 / Flickr
No te quites los zapatos
De acuerdo con una experimentada azafata, las cabinas de los aviones, sobre todo el piso, suele estar lleno de cientos de bacterias, no solo por el paso de los pasajeros sino por los accidentes que pueden ocurrir en un vuelo de larga distancia. Desde el rompimiento de un vaso de vidrio que puede dejar cristales diminutos en la alfombra, hasta residuos de vómito o sangre de otros pasajeros.
No pidas hielo en tu bebida
De acuerdo con una investigación de la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos (EPA) en la que se examinaron los tanques de agua potable de 327 aviones, solo el 15 % pasó las pruebas sanitarias, mientras que en el resto se encontraron diferentes tipos de bacterias.
Aunque en la mayoría de los vuelos ahora se ofrece agua embotellada, los hielos se producen con el suministro de agua del avión. Así que es mejor evitarlos aunque te gusten las bebidas frías.
Si puedes, también evita las tazas de té o café, ya que aunque el agua se hierve, también proviene del suministro del avión
No permanezcas todo el tiempo sentado
Pasar muchas horas sentado hace que la circulación en las piernas no sea la adecuada, lo cual puede llegar a provocar una trombosis. Por eso, varios doctores recomiendan levantarse del asiento de vez en cuando para fomentar la circulación en las extremidades inferiores o hacer ligeros ejercicios en el mismo asiento como flexionar las piernas o rotar ligeramente la cadera.
No apagues el ventilador de aire sobre tu asiento
Aunque a veces puede ser molesto el flujo de aire constante sobre nuestra cabeza, los médicos recomiendan mantener abierta la circulación de aire en nivel medio o máximo para crear una barrera protectora de aire en tu propio asiento contra gérmenes que estén flotando en la cabina.
Evita comer lo que cayó sobre la mesa plegable
Si algún trozo de comida se te sale del plato o cae sobre la superficie de la mesa plegable es mejor no comerlo. De acuerdo con un profesor de epidemiología de la Universidad de Columbia, estas mesitas rara vez se desinfectan, y solo se sacuden o se les pasa un trapo húmedo una vez al día. Así que son focos de contaminación importante.
No uses las cobijas de los aviones
Tanto las cobijas como las almohadas se reciclan vuelo tras vuelo y tardan en enviarse a la lavandería; en consecuencia, son un caldo de cultivo para gérmenes y bacterias por su uso constante y a veces inadecuado por parte de otros pasajeros.
No dejes de tomar agua
Debido a que las cabinas de los aviones se deshumidifican para poder hacer respirable el aire a más de 2,000 metros de altura, es indispensable mantener la hidratación constante. También se recomienda reducir el consumo de bebidas alcohólicas o evitarlas durante el vuelo, ya que aceleran la deshidratación.
Evita tocar directamente el botón de desagüe del baño
Esto también incluye las llaves del lavamanos. Esto debido a que su utilización constante hace que sean un lugar perfecto para la proliferación de bacterias y gérmenes. Por ello que algunos médicos recomiendan usar una toalla de papel para presionar el botón de desagüe, manipular el lavamanos, e incluso abrir la puerta del baño.
No te duermas recargando la cabeza sobre la ventanilla
¿Te has puesto a pensar cuantas personas hacen lo mismo? Esto es como si todos dejaran impresa su huella en las ventanillas y después tú llegaras a removerlas, sin olvidar los estornudos, los bostezos y demás transmisores de gérmenes.
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