Uno de los muchos atractivos de la Ciudad de México es que se encuentra como la segunda urbe del mundo con el mayor número de museos después de Londres; siendo así, era de esperarse que las temáticas de los museos capitalinos sean tan variadas como entretenidas, abarcado prácticamente todos los gustos. Sin embargo, en esta ocasión te diremos cuáles son los museos pensados en los niños para fomentar su interés en la cultura y la ciencia; seguramente a tus hijos les encantará y podrás disfrutar junto con ellos un día muy enriquecedor y divertido.
Fuente: Foto: Papalote Museo del Niño por Elsa López/ CC BY 2.0/Flickr
Universum
En el corazón de Ciudad Universitaria, al sur de la Ciudad de México, Universum ofrece un espacio inmejorable en sus tres salas interactivas para acercar a los niños al mundo de la ciencia a través de divertidos experimentos físicos con los cuáles se explica de una manera simple, la complejidad del universo y nuestro mismo planeta. Lo mejor de todo es que los niños no son los únicos que se divierten aquí, ya que los adultos también disfrutan el museo.
Las exposiciones permanentes abarcan temáticas sobre biodiversidad, inteligencia artificial, astronomía, estructura de la materia, además de un fascinante mariposario y planetario.
Papalote Museo del Niño
Si se trata de aprender jugando, este museo es el mejor sitio para llevar a los niños, pues se especializa en ofrecer experiencias lúdicas para ayudar a despertar y alentar la curiosidad de los niños en la ciencia y la naturaleza. Entre las actividades más entretenidas que encontrarán tus hijos en Papalote están tomar el papel de un arqueólogo descubriendo ruinas mayas, explorar su capacidad de orientación sin el sentido de la vista, hacer experimentos en laboratorios, jugar con diferentes estados de la materia y más.
Por si fuera poco, Papalote ofrece la pantalla Imax más grande de Latinoamérica para disfrutar documentales sobre vida animal y temas espaciales.
Museo de Historia Natural
En el Museo de Historia Natural, además de aprender sobre la evolución de nuestro planeta y las especies que lo habitan, tus hijos desarrollarán una conciencia ecológica que los acercará más al desarrollo de una cultura asociada al respeto del medio ambiente. Además de las exposiciones temporales en este sitio se localiza uno de los murales más emblemáticos pero poco conocidos de Diego Rivera titulado El agua, origen de la vida que seguramente te dejará impactado.
Museo de cera y museo de Ripley
El Museo de Cera de la Ciudad de México es todo un clásico no solo para los niños sino para los adultos. No importa cuántas veces lo hayas visitado, porque este museo siempre incorpora nuevas figuras que sorprenden por su grado de realismo. Y si quieres echar a volar tu imaginación, a unos cuantos pasos del Museo de Cera puedes aprovechar para conocer la inverosímil exhibición del Museo de Ripley donde podrás observar objetos sumamente extraños coleccionados por Robert Rypley durante sus viajes a las zonas más remotas del planeta.
Museo del Juguete Antiguo
Este museo no solo maravillará a tus hijos, también a ti, pues cuenta con la colección de juguetes más grande del mundo catalogados por generaciones, así que no sería raro que la nostalgia te atrapara al descubrir que aquí aún conservan los juguetes que a ti te maravillaban de niño, o aquellos que siempre anhelaste pero nunca tuviste.
Acuario Inbursa
Aunque este no es propiamente un museo, funciona de igual manera como un espacio educativo para acercarse a la vida marina. Los niños quedarán fascinados al contemplar peces de diferentes océanos reunidos en un solo lugar. El acuario Inbursa es el más grande de Latinoamérica y cuenta con tecnología de punta que brinda herramientas multimedia a los visitantes.
Por cierto, si andas por el acuario también puedes aprovechar para darte una vuelta por el museo Soumaya y Antara Fashion Hall que cuenta con un food court que seguramente les encantará a tus hijos
Castillo de Chapultepec
El Museo Nacional de Historia, mejor conocido como Castillo de Chapultepec es uno de los lugares más importantes de la historia de México, pues no solo reguarda una valiosa colección de objetos de diferentes épocas, sino que el propio castillo fue escenario de episodios trascendentales como la Invasión Norteamericana y el periodo del Segundo Imperio Mexicano. La visita a este recinto también es una buena oportunidad para disfrutar de las hermosas vistas de la ciudad así como el bosque y el lago que lo circundan.
