La Ciudad de México no solo luce de día; al anochecer se convierte en un escenario luminoso digno de admiración que seguramente te hará enamorarte de sus monumentos y plazas. Aquí te decimos cuáles son los paisajes nocturnos que no puedes perderte en la capital
Fuente: Foto: Rafael Martínez / CC By-SA 2.0/ Flick
Alameda Central
Desde sus última remodelación, la Alameda Central, considerada el primer parque de América, es uno de los paseos nocturnos más disfrutables del Centro Histórico. En sus pasillos se pueden admirar fuentes luminosas danzantes, esculturas alusivas a la cultura griega y monumentos emblemáticos como el famoso Hemiciclo a Juárez.
Monumento a la Revolución
El Monumento a la Revolución es uno de los espacios mejor iluminados de la ciudad. Al anochecer, el juego de luces que se proyecta sobre el monumento genera efectos espectaculares que se coordinan con las fuentes danzantes situadas en la explanada de la Plaza de la República. Sin duda este es uno de los escenarios imperdibles para un paseo a la luz de la luna.
Palacio de Bellas Artes
Admira con mayor detalle la belleza del Palacio de Bellas Artes a través de su iluminación nocturna. La fachada de este icono arquitectónico de la ciudad esta decorada con numerosas esculturas creadas por artistas europeos de renombre en donde se pueden observar representaciones de musas, diosas y pegasos.
Paseo de la Reforma
La noche permite ver la cara más glamorosa del Paseo de la Reforma, la avenida inspirada en el famoso paseo parisino Champs Elysées. A lo largo de Paseo de la Reforma podrás admirar en todo su esplendor el monumento del Ángel de la Independencia, así como la fuente de la Diana Cazadora y la llamada Estela de Luz. Los tres monumentos cuentan con iluminación dinámica que permite tener perspectivas diferentes de cada estructura.
Tu también haz lucir tu propio hogar con estos tips de iluminación para interiores y exteriores que le darán un toque más elegante a los espacios que más te importan.